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lunes, 29 de septiembre de 2008

¡Qué grande es el cine!

¡Qué grande es el cine!
¡Qué grande era ese programa!
Dirigido y conducido por José Luis Garci, durante diez años pudimos disfrutar a través de la televisión estatal de ese gran programa que incluía una película, a menudo clásica, y un debate sobre la misma. Se emitía los lunes sobre la diez de la noche por la segunda cadena. A tal hora ya tenía el video preparado para grabar la película y el debate por si acaso caía en brazos de Morfeo durante alguna pausa publicitaria (cosa que ocurría con frecuencia).

Supongo que somos muchos los que aprendimos mucho de cine visionando las tertulias que tenían la virtud de ser capaces de captar adeptos a la causa del cine. Pude ver películas que no creo que las pudiera haber visto de otra manera y fui cómplice de los tertulianos intentando adivinar cuál sería la escena favorita de cada unos de los tertulianos citados para la ocasión.

Breve encuentro, Carta a una desconocida, La Kermesse heroica, Fresas Salvajes, Los cuatrocientos golpes y otros muchos títulos fueron gratos desubrimientos para mí.

Cuando televisión emite un título de uno de los grandes directores ya sabes que es una película buena pero cuando en el programa pasaban cualquier película, la conocieras o no, no perdías el tiempo. Podía gustarte más o menos el film en cuestión pero siempre sabías que descubrirías algo interesante, algo que se te escapaba, y que los tertulianos del día te mostraban. Claro que puedes ver buenas películas por televisión, y más ahora con las plataformas digitales pero tan importante como verlas es saber apreciarlas en su justa medida y crecer en tu cultura cinematográfica en su visionado.

Con tertulianos de todo tipo (Prada, Marías, Guillén Cuervo, Jiménez Rico, Lamet…), unos más pedantes y otros más didácticos, unos más retrógrados y otros más muermos,… este programa tuvo la capacidad de atrapar a la gente y hacerla interesar por el cine. Ese debería ser el objetivo de una buena televisión pública. Entonces, ¿por qué desapareció?, ¿por qué no tenemos ningún programa similar?,… En fin es lo de siempre, el eterno debate de la televisión publica: dar un servicio o estar al servicio de…. En fin, es un tema cansino que no me apetece tratar, me pone de malhumor.

En este enlace hallaréis algunas de las películas emitidas, todas ellas recomendables:

7 comentarios:

  1. Cuanta razón tienes, todavía recuerdo como rememoraba un tal Lamet el haberse enamorado de Heidi Lamar en una sesión doble de cine al aire libre., o la pipa de Javier Marías. Cuanto humo en ese plató por cierto !!!.

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  2. Las audiencias son las que mandan....en fins.

    Reconozco (sip) que cambiaba o apagaba cuando llegaba la tertulia..Así que...ahhhhh

    Shaluditoss

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  3. Soler, por ahí he leído que Lamet fue censor en época de triste recuerdo, no sé si será verdad

    Un abrazo

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  4. Chulima, pues no sabes lo que te perdías. Eso sí reconozco haberme quedado dormida en alguna de ellas (en función del tertuliano)

    Besos

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  5. No se puede ser, lo que si se es que era profesor en la Academia de Cine de Madrid. Hombre el perfil del personaje podría encajar como censor ... Puestos elocubrar me lo imagino como el típico "porogresista" dentro del régimen. Hay que tener en cuenta que en el aparato del franquismo los grises tenian tonalidades.

    De todas maneras todo muy gris.

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  6. Quina rahó tingueu!

    Es veritat, aquet programa era meravillós. L'extraño molt

    El de la pipa era Miguel Marías, Javier Marías es otro entrañable q hace unos fabulosos ladrillos q me tienen loco (recomiendo "Tu rostro mañana" para quien sea capaz de enfrentar un libro como una escalada al everest)

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  7. macarra ilustrado: tomo nota de la recomendación, un buen tocho a su debido tiempo es una buena elección.

    Saludos

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