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domingo, 11 de enero de 2009

Roonie O'Sullivan


Escuchaba la radio el miércoles a la noche. El insomnio se apoderó de mí o acaso estaba epatado por la calidad del programa radiofónica al que prestaba mi apreciado oído a tan intempestiva hora como las 00:50 h. (ya era jueves). No creo en la última opción pero el hecho es que escuchaba el programa deportivo de Rac1 Tu diràs. Es el típico programa nocturno deportivo al uso.
A tal hora comenzaba una sección que trata de descubrir la personalidad excéntrica de grandes deportistas. En este caso hablaron del campeón mundial vigente de snooker (una modalidad de billar de troneras con bolas de diversos colores que deben ser embocadas en un orden concreto y que compiten dos personas). Hablo de Rooney O’Sullivan, campeón mundial, como he dicho, de snooker.

Transcribo lo que explicaban en el programa radiofónico:

“Roonie O’Sullivan está considerado como el mayor talento natural que ha dado el snooker en su historia. Está considerado como un genio, y como tal, le separa una finísima línea de la locura.

Es profesional desde 1992. Tiene 33 años. Es decir, era profesional con tan sólo 17 años. Es otro caso de precocidad sin precedentes en este ámbito. Ha ganado 42 torneos, que es una barbaridad. Ha sido tres veces campeón del mundo (2001, 2004, 2008). Acumula 6 millones de libras esterlinas en ganancias: el segundo de todos los tiempos con sólo 33 años, en un deporte que permite cierta longevidad a sus practicantes pues el desgaste físico es mínimo. El desgaste es más bien psíquico porque la presión y la competencia son altas y se deben guardar las formas (que no sería el caso como luego veremos). Rooney al margen de su evidente talento deportivo tiene la capacidad de polarizar la atención del público a través de sus actitudes no siempre positivas. De hecho es uno de los personajes que acaparan la atención de los diarios sensacionalistas británicos la cual cosa en principio no sería lo ideal. Ya a los 10 años había conseguido un “century”, conseguir 100 puntos, cosa en absoluto sencilla. La máxima puntuación posible es 147 puntos, gesta consiguió por primera vez a los 15 años. Con 16 ya era profesional, ganando sus 32 primeras partidas, hazaña que nadie ha repetido. También fue el más joven en disputar un campeonato mundial con tan sólo 17 años y ya ganando su primer torneo (también pionero en esto). Podemos hablar que Rooney es el mejor jugador de snooker de todos los tiempos. Su personalidad, no obstante, es compleja, es depresivo, adictivo, perfeccionista, paranoico,… Ha sido definido en muchas ocasiones como el George Best del snooker. Es incapaz de controlar sus emociones y ello condiciona su forma de ser. Proviene de una familia desestructurada: criado en el barrio “pijo” de Essex. Es hijo de un empresario propietario de una cadena de sex shops del Soho londinense que está cumpliendo una condena de cadena perpetua en un penal británico por asesinar el guardaespaldas de Charlie Kray, uno de los gemelos mafiosos que dominó el crimen organizado del East End londinense en las décadas de los 50, 60 y parte de los 70. Le apuñaló 18 veces en un local nocturno (alegó defensa propia!!!). Su madre, siciliana, también estuvo en prisión 7 meses.

Rooney acumula múltiples sanciones por conductas “poco frecuentes: mundial de 1996, con veinte años se enfrenta a un canadiense y viendo la inferioridad del rival juega con la izquierda (él es diestro) y le avasalla. Se abre una investigación por conducta indebida y O’Sullivan alega que con la izquierda es muy superior a su rival canadiense (como se demostró). Le hacen jugar tres partidas contra un ex campeón del mundo, Rooney es obligado a jugar con la izquierda y gana en las tres ocasiones.

Cuando se aburre abandona temporalmente el snooker para hacer otras actividades: ser apuntó a un torneo profesional de alto nivel de billar americano y en su debut llegó a cuartos de final rodeado como estaba de los grandes monstruos americanos de esta modalidad.

Cierta ocasión, en el mismo mundial de 1996 le partió la cara al jefe de prensa del torneo.

En 1998 ganó el mundial colocado “hasta las cejas” de marihuana, a su mujer actual la conoció en narcóticos anónimos,…

Su relación con la prensa también es especial: en el último mundial de China ante una pregunta que no gustó replicó al entrevistador que cuál era el tamaño de su pene (del periodista, of course) instándole asimismo a que le realizara una felación (el periodista, of course) escenificando la acción con el micro que tenía delante,…

En fin, un “angelito”

3 comentarios:

  1. Querido Sese, eso es lo que tenemos los genios, que estamos todos grillaos....
    jajaja..y sin serlo más.

    Besoss y Feliz Año nuevo

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  2. Chulima, pues yo no estoy grillao, o eso creo y soy un genio. Aunque aún falta que alguien frote la lámpara para poder mostrar mis poderes.

    Besos, que vaya bien.

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  3. Si no me equivoco hace dos semanas a vuelto a ser campeón del mundo de Snooker ... vaya perla, pero que bueno!!!

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