Abrir un libro de Auster es una experiencia que me ha llevado
a extremos contrapuestos, tras acabar la lectura en unos casos no conecto con él
y me deja una sensación de indiferencia, pero en otros casos me reconcilia con
la lectura y define esa sensación de placer que sólo un gran libro proporciona.
Trilogía de Nueva York y El Palacio de la Luna son dos
excelentes relatos del autor norteamericano, la soledad del hombre frente a su
entorno, la soledad que podemos sentir
en ambientes tan cosmopolitas como Nueva York han sido descritos admirablemente
por Auster.
En otras ocasiones no he llegado a conectar plenamente,
Invisible es un ejemplo de ello, valoro su propuesta pero no consigue seducirme, aún así
no deja de ser un buen ejercicio literario
Y otras veces me ha dejado totalmente indiferente: La noche
del oráculo
Esta vez Leviatán ha conseguido definir al Auster que me gusta. Siempre experimentando
con la técnica narrativa, ahora vemos como el inicio del relato conecta con el
final, a partir de él desarrolla el hilo narrativo donde el personaje central
es descrito por un íntimo amigo que toma un protagonismo secundario en el
relato. Encontramos un poco del desarraigo social del protagonista de El Palacio de la Luna o de Trilogía de Nueva York y el gusto por experimentar con la narrativa que en Invisible llevó a su
máxima expresión. “Me han dicho que han dicho, y yo lo intento poner todo en
claro”, es un poco eso del mismo modo que en Invisible se preguntaba sobre la
realidad de los hechos aquí intenta llegar a esos hechos por relatos de
terceras personas que el protagonista intenta poner en claro.
También se repite una vez más el escritor como personaje de
la ficción. En esta ocasión plasmando las
mismas dificultades reales que un escritor tiene a la hora de confeccionar la
ficción, tanto es así que nos sentimos
cómplices del propio Auster (el protagonista que escribe la ficción se llama Peter Aaron, las mismas iniciales que Paul Auster)
Una gran novela en la que encontramos al mejor Auster:
personajes desarraigados que buscan su ubicación en la sociedad y el placer de
experimentar con la narrativa, repitiendo el escritor como personaje de la
ficción, usa a éste para hacernos cómplices de las tensiones del escritor
durante la confección de su obra.
Ficha técnica:
Autor: Paul Auster
Traducción: Maribel de Juan
Editorial: Anagrama
Publicación: Agosto 2000
Colección: Compactos
Páginas: 269
Sinopsis:
Peter Aaron recibe la visita de dos agentes del FBI tras la muerte de su amigo, el también escritor Benjamin Sachs, en extrañas circunstancias. Peter decide no contar nada al FBI pero decide plasmar en un libro la historia de los hechos, unos hechos a los que en ocasiones llegará a partir de la experiencias de terceras personas así como de su propia relación con Benjamin.