Destinos turísticos alternativos

Parece que no pero las vacaciones de Semana Santa se acercan. Es tiempo de preparativos y ahí van unas cuantas ideas de destinos alternativos para gente cuanto menos intrépida:

Isla de las muñecas (México)

Situada en un humedal, a pocos kms. De la capital México D.. Sólo se puede acceder con canoa y con guía a través del canal de Xochimilco. Esta islá está abandonada, aunque antes tenía un único habitante que se llamaba Julián Santana Barrera que era colleccionista, aunque algo macabro. La leyenda dice que una niña se ahogó en los canales y este señor encontró la muñeca de la niña flotando, la muñeca estaba demacrada y desde entonces se dedicó a coleccionar todas las muñecas abandonadas y estropeadas que hallaba. Así lo hizo durante 50 años. Hoy la isla está llena de muñecas clavadas a los árboles, colgadas de las casas ruinosas. Son muñecas que están quemadas, les falta un ojo, un brazo… Hoy la isla es un destino turístico. Julián Santana murió ahogado el año 2001 y desde entonces las visitas tienen algo de macabro y lúgubre.

Cándido Godoy (Brasil)

Ciudad del sus de Brasil que tiene la peculiaridad que gran parte de sus habitantes son gemelos (el índice es 18 veces superior a la media mundial). Un 20% de los embarazo son de gemelos. Algunos historiadores atribuyen la causa de este fenómeno a unos experimentos de Josef Menguele, el ángel de la muerte, el famoso criminal nazi que se dice que se estableció en la ciudad y ejerció la medicina. A partir de entonces el índice de gemelos se disparó.

Se habla de dos causas posibles:

- Fue capaz de realizar alteraciones genéticas antes de que se realizaran en laboratorios.

- EL lugar está rodeado de residuos tóxicos y el contacto con ellos de los ciudadanos alteraría el porcentaje normal de nacimiento de gemelos.

Kryziu Kalnas (Lituania)

Montaña símbolo de la independencia. Lituana, símbolo de orgullo de su independencia. El tema es que en esta montaña, que es más bien un túmulo, la gente deja cruces, en principio eran unas pocas pero tras la irrupción de los alemanes en la Segunda Guerra Mundial que las hicieron sacar los nativos se revelaron y llenaron el montículo de cruces. Los alemanes llegaron a allanar el túmulo y lo convirtieron en un prado pero los lituanos trajeron arena y reconstruyeron su montaña y volvieron a poblar con multitud de cruces, tantas que a día de hoy hay más de 200.000 en un túmulo de escasas dimensiones. Se ha convertido en un lugar de culto para los lituanos.

Información extraída (prácticamente es una trascripción) del programa de radio de Rac1 El món a Rac1 en su sección “frikipedia”.