Quien más quien menos tiene sus fantasías sexuales que las adivina imposibles, al menos algunas de ellas, y que aun así no renuncia a ellas.
Y una de mis fantasías es de las más factibles, por ley de probabilidades. Me explico: siempre he ansiado vivir una de esos tórridos encuentros en los ascensores que en las películas acostumbra a suceder. En mi caso la agraciada con tal evento sería Natalie Portman. Y es de las más factibles porque el ascensor lo cojo como mínimo cuatro veces al día. Y claro es más factible que mi otra fantasía, por ejemplo, con la propia Natalie Portman (no sabe lo que se pierde) en un probador de El Corte Inglés.
Como frecuento menos los probadorers de los grandes almacenes que los ascensores es lógico concluir que es más factible el primer habitáculo que el segundo.
Y con tal afán cada día tomo el ascensor para medio minuto después apearme de tal vehículo con cierta desilusión.
Cierto jueves llamé el ascensor y volví a imaginar la fantasía de nuevo. Apreté el botón de planta baja y en el segundo el ascensor se detuvo a recoger una vecina (jubilada ella) que seguía el mismo trayecto que un servidor.
Vaya no es Natalie Portman. Otra vez será.
Y el ascensor se detuvo en el primero pero el vecino en cuestión renunció a subir dado el overbooking del receptáculo y los pocos pisos que le separaban de la calle.
Y llegamos a la planta baja dispuestos a salir y un servidor esperando mejor ocasión para satisfacer mi fantasía sexual.
Adiós, buenos días
Hasta la próxima
Y ¡Oh, sorpresa!, la puerta interior del ascensor se atasca y nos quedamos atrapados.
Ya me pasó el otro día, y piqué al entresuelo y la puerta se abrió.
Nada, en el entresuelo la puerta no se abre. Ni en el primero.
Vaya, ya me veo aquí media mañana.
Treinta segundos cambiando de pisos y nada.
Y la vecina, ay, que me está entrando calor, y se quita la bufanda.
Y mi pensamiento adquiere dos vertientes. Una, qué lástima que no sea Natalie Portman. Y otra, vaya, espero que no le dé por el histerismo y me monté el pollo de la claustrofobia y demás.
Hasta que al final picando al entresuelo la puerta se abre y nos libramos del encierro.
Suerte que la historia acabó rápido y me pude librar del presumible cuadro histérico que parecía vislumbrarse dada la presumible fobia de la vecina.
Y esta anécdota me vino a demostrar que cada día estoy más cerca de ver realizada mi fantasía, de momento ya me he quedado encerrado (apenas un minuto, tiempo insuficiente) en un ascensor, ahora sólo falta la compañía pertinente y la duración adecuada.
La escena fue, hubiera sido, más parecida a ésta:
Que a ésta:
Pero en fin...presiento que sólo es cuestión de tiempo.
Como hoy te has levantado optimista no voy a ser yo la que te diga que las probabilidades no dependen del ascensor. Las fantasías se cumplen, y si no que se lo digan a Elena Tablada.
ResponderEliminarUn beso
¡Y a coger ascensores!
Dorothy: soy consciente de que las probabilidades dependen del ascensor pero sobre todo de la propia Natalie, esa es otra. Aunque mejor conservar la esperanza...
EliminarBesos (y yo sin saber quién es Elena Tablada!!!)
Jajajaja, cada vez más cerca de ver cumplida tu fantasía... Me han gustado las dos fotos explicativas del final.
ResponderEliminarSonix: estadísticamente estoy más cerca hoy que ayer de ver cumplido mi sueño. Es un poco eso de la botella medio llena, jeje
EliminarJajajaja di que sí cada vez está más cerca! Y por cierto, no pensaste que tu fueras la fantasía sexual de tu vecina cuando empezó a quitarse la bufanda? :)))
ResponderEliminarLa mía con Matt Damon, aún la siento algo lejana...
SALUDos y feliz semana Sese
Sieslo: no lo pensé pero ahora que lo diuces me parece la cosa más natural del mundo, y es que si no me quiero yo... jejeje
EliminarPues ya sabes para que sea más cercana sólo tienes que coger más ascensores, jajaja
Saludos cordiales, Sieslo
¡Uff! En un ascensor... Yo en un ascensor soy más del tipo "ataque de claustrofobia". Creo que hay fantasías que son mejor siendo fantasías que convirtiéndolas en realidad, no termino yo de verlo: tanto movimiento en un lugar tan estrecho,... Si algún día se te cruza la Portman y tus sueños se hacen realidad, por favor, cuéntame si es tan incómodo como me imagino, ¡jajajajajajaja! Un beso
ResponderEliminarVir: acaso en la incomodidad, la inseguridad, el peligro... esté la clave de la fantasía, ya que es una quimera, qué mejor que ubicarla en un lugar también quimérico, no?
EliminarBesos
evidentemente no desesperaré y seguiré frecuentando el ascensor (y es que ochos pisos son muchos pisos)
ResponderEliminarSaludos
Pues tuviste suerte, porque yo una vez me quedé en un ascensor muuucho rato y cuando, me quedé con quien debía, pensé en la segunda opción y nos acercamos... volvió la luz. Y sabes? es casi imposible, pero justo se había parado en el portal. Y allí estaban los vecinos congregados esperando a los pobres atrpados (saludos cordiales a mis ex vecinos de comunidad autónoma)
ResponderEliminarEn fin, que las peliculadas son eso, peliculadas. Como decían en Friends, si ves mucho cine erótico acabas mirando con ojitos al pizzero y si es pizzera le dices que no tienes cambio (adivina de quién era la frase...)
Besos
PD. He dejado media intimidad aquí, expuesta!
EliminarMientras Leo: media intimidad amparada por el anonimato jajaja. Supongo que los vecinos os ovacionarían a la apertura de las puertas no? jajaja, yo lo hubiera hecho, sin duda, jajaja
EliminarBesos
Yo creo que a mí eso del ascensor me daría claustrofobia, fuera con quien fuera el encierro XD Pero vamos, tú no pierdas la esperanza que a veces hay cosas imposibles que terminan por no serlo tanto.
ResponderEliminarsaluditos
Lillu: quién sabe si la cosa al final no sería como me imagino pero en cualquier caso es lo que tienen las fantasías que no contemplan contratiempos mundanos
EliminarSaludos
Si esperas a Natalie Portman lo tienes crudo.Lo más factible es con una noviet@/rollet@ en el ascensor de tu casa a las cuatro de la madrugada, dada la media de edad tus vecinas, estarán todas durmiendo y os dará tiempo.
ResponderEliminarpseudosocióloga: ya pero una novieta/rollete no sirve, no eleva la tesitura a la categoría de fantasía
EliminarJajjjjaaaa!!!!!! Y que dices que tiene la natalie esa????? Pobre vecina mira que dejarla a pan y agua!!! Y todo porque no podía cumplir tu fantasía!!! ;)
ResponderEliminarsuguspiña: me parece que han sido muchas vecinas y compañeras de ascensor que se han quedado a pan y agua, eso sí, seguro que lo preferían así. Natalie Portman, por otra parte, estaría encantada de hacer realidad mi sueño, eso ni lo dudes, jajaja
EliminarBesos
Esperemos que Natalie Portman visite pronto tu ciudad y puedas conocerla aunque no sea en un ascensor.
ResponderEliminarSaludos
la MaLquEridA: quién sabe si una vez si me llevaría una desiluysión tras conocerla,jajaja, aunque no creo.
EliminarSaludos
jijiji menos mal que salieron pronto, y la señora no entró en pánico... porque a mi me da un ataque si me pasa eso! jajaja intentaría relajarme, pero vamos, que los ascensores no me van nada jajaja.
ResponderEliminarNatalie Portman? esa flacuchenta? jejeje yo creí que tu estilo era más Scarlett Johanson ;-)
Un beso!
L87: me queda la duda si hubiera sido de calmar el supuesto ataque de angustía de la señora como en las películas, eso de arrerarle una bofetada para sosegarla, siempre me quedará la duda si sería capaz de hacerlo!!!! Y Natalie Portman, Scarlett Johannson,..qué más da, sí a todo!!!
EliminarBesos
Igual eras tú la fantasía sexual de la aguelica jubilata y le fastidiaste su pelicula por ponerte tan hosco.
ResponderEliminarMe voy a dar una gueltecica por tu blog que hace mucho que no me paso!!
el chico de la consuelo: así de duro es el mundo, no siempre se pueden cumplir los deseos, jajaja, aunque dudo que pueda éste que escribe ser objeto de una fantasía sexual, y menos de la vecina en cuestión
Eliminargracias por la visita!!!!
Mejor que esperar la fantasía, vete a buscarla.
ResponderEliminarIntenta averiguar si el edificio de Natalie Portman tiene ascensor y si está viejuno.
Cuando lo sepas me lo dices y te dará instrucciones.
"apenas un minuto, tiempo suficiente" jajajaja. Esto es verdad, pero jamás debe decirse
JuanRa Diablo: nada, nada, que la fantasía venga a mí, que de otro modo pierde autenticidad la misma. Y creo que ell entrecomillado no es el correcto, revisa el post (y es que estoy de acuerdo en eso que jamás debe decirse tal cosa.
EliminarSaludos
Anda, es verdad, dice insuficiente. Con la gracia que me hizo...
ResponderEliminarDe todas formas, un minuto bien aprovechado podría ser glorioso... jeje