Visita a Zaragoza

Vinieron de Barcelona para ver la Expo. El viernes llegaron tarde, muy tarde a Zaragoza. Encima se perdieron, y eso que encontrar el piso es fácil, es casi imposible perderse. Pero se perdieron. Luego dijeron que las calles no están señalizadas (es verdad), que el plano que les pasé no estaba claro (eso no es verdad), que si tal, que si cual... Se perdieron.
A la mañana siguiente, el objetivo era acudir pronto al recinto para visitar el Pabellón de España. Objetivo no cumplido. Aparecieron en hora punta de entrada. Más de media hora para entrar, y nos perdimos la visita al pabellón. Vimos algunos países (los que no tenían cola), vimos la cabalgata del Cirque du Soleil, espectacular como todos los días, y posteriormente nos metimos en el acuario (teníamos el preciado fast-pass para visitarlo).

Dentro del acuario sucedió lo que terminó de jorobar la visita: me llamó un amigo, cuyas iniciales responden a DCA, y que suele ir acompañado de una nube de tormenta. Es algo gafe. Incluso estando a 300 Km de Zaragoza, su llamada provocó un cambio meteorológico brutal. Aparecieron nubes negras, alguna gota... quisimos entrar a comer en un restaurante, pero estaban todos muy llenos. Otra vez era hora punta. Decidimos irnos del recinto para comer fuera, pero cuando estábamos apunto de salir, empeoró el tiempo y nos tuvimos que refugiar en una zona cubierta, en el interior del recinto. Cayó la del 15. Rayos, truenos, viento, lluvia... (gracias, DCA). Comimos patatas y frutos secos comprados en una tienda de patatas y frutos secos. Vimos algún pabellón más, y cuando paró de llover nos fuimos. Una visita corta marcada por las inclemencias del tiempo (DCA, otro día no llames).

Para compensar la mala suerte, después de un rato de andar (otra vez la hora punta) encontramos un buen sitio para cenar, barato, con un servicio nulo, pero con unas raciones buenísimas, y un buen bar de copas con muy buena música.

Al día siguiente visita al Pilar, video de fofoto-bateria delante de la basílica, huevos rotos para comer, cafetito y de vuelta a casa.

Se agradece la visita. Volved cuando queráis, y seréis bienvenidos. (Señor DCA, tu cuando vengas déjate la nube en tu casa, majete)