El anuncio de la ONCE seduciéndonos para participar en el sorteo del 9 de agosto nos invita a volver a vivir los 20 años, retornar a ser unos veinteañeros, a los que ya no lo somos, a los que aún no lo son y a comportarse como tal a los que están en ese edad.
Y como todas las edades tiene sus cosas buenas y cosas malas (que la distancia ayuda a enmascarar).
No tengo un anhelo especial en volver a tal edad aunque sí me he quedado con las ganas de hacer una serie de cosas que son exclusivas, o al menos así lo entiendo o así lo dicta mi entorno, de tal edad.
He aquí algunas (al menos las confesables) de estas actividades que entiendo típicas de veienteañeros y para las que, desgraciadamente, ya se me ha pasado el arroz:
* Ir a los Sanfermines: o al menos vivirlos desde el desenfreno que la juventud te facilita. Está claro que siempre puedo ir a las fiestas pamplonicas, pero vivirlas como un veinteañero... pues va a ser que no.
* Recorrer Europa en un interrail, o algo parecido, con la mochila a cuestas y a la aventura. Cómo molaría, pero es pensar en las incomodidades a sufrir y se me quitan las ganas.
* Ir al extranjero a trabajar un par de meses y aprender el idioma. O participar en un programa de intercambio. Ainssss!!!!, como me he arrepentido de no haber disfrutado de la experiencia. Ahora ya es imposible.
Así que si estáis en esa edad no dejéis de hacer esas cosas que sabéis que no las podréis hacer más tarde.
¿Más sugerencias?, yo, por mi parte, me voy a jugar una partidita de petanca, jeje.